Se cumplen 10 años de los atentados de Londres por el terrorismo islamista. Han pasado muchas cosas desde entonces y se me ocurren más. Sin embargo releyendo lo que escribimos en 2005 me parece absolutamente válido y de actualidad. Ahí lo dejo tal y como lo publiqué en su momento.
7/7/2005
Soy español y vivo en el Reino Unido. Ayer el terrorismo siguió masacrando vilmente en esta Guerra contra los valores de occidente. Es lo que saben hacer y de alguna forma todos lo esperábamos. Es muy difícil controlar la seguridad de un país, y más de la forma en que estos animales atentan.
Nuestros hermanos ingleses están rotos, heridos, tristes y cualquier adjetivo que acompañe a estos sentimientos es válido. El primer ministro ha hecho un comunicado reafirmando nuestros valores y abogando por la derrota del terrorismo. El señor Blair tiene partidarios y detractores, pero estos últimos no han salido a la calle a llamarle asesino y hacerle culpable de esta catástrofe. La policía busca a los culpables y la población continúa la vida con normalidad. La clase política se ocupa de apoyar la unión del país y nadie de la oposición ha hecho del partido del gobierno su enemigo, pues ya saben que ahí no es donde hay que buscar a los asesinos.
Bien, cuando uno ve esto se enorgullece de estar compartiendo un poco de mi vida con este pueblo. Del mismo modo que asistí atónito y profundamente triste el 11 de Marzo del año pasado a lo que estaba pasando en nuestra España, hoy me siento si cabe con más pena al tener que comparar las dos reacciones tan diferentes.
Quizá la diferencia es que aquí se considera que el terrorismo es culpable y hay que combatirlo siempre. Se podrá estar de acuerdo con Blair o no, tendremos unas ideas u otras, eso está bien pero hay principios que son básicos. No estoy convencido en absoluto de que en España estemos en ese sistema todavía. En los últimos 30 años estamos viendo todo al revés, o nos lo están haciendo ver así, que es lo mismo ya que lo aceptamos de buen grado. Si recibimos un ataque en Madrid es porque nuestro gobierno lo ha creado. Si los terroristas matan es porque tienen razones al haber estado reprimidos. Nuestra historia es horrible y sangrienta y nuestros valores no han creado más que injusticia.
Que haya minorías que así piensen, no es sorprendente, en todos los sitios los hay. Pero que esa opinión de auto destrucción y rabia anide tanto en una población es algo que habría que analizar. En España está claro de dónde vienen tales sentimientos: el separatismo y la extrema izquierda crea el exabrupto y la izquierda socialista se ocupa de dar un buen altavoz para desarrollarlo. ¿De dónde viene esta actitud? En esta vida, o creas o destruyes. Los valores y tu independencia te guían, pero sobre todo los valores. Cuando se cree, como la izquierda, que la historia de España es algo negativo y traumático, la tradición un fraude y Dios un concepto para burlar, es fácil quedarte sin ningún referente y no tener más razón para moverte que el estar a la contra permanente y apoyar cualquier tipo de elemento que destruye.
Nos están embruteciendo y nos hacen ver que somos feos. No es cierto. Estos sujetos aparecieron en la historia hace cuatro días y se han adueñado de la misma y del diccionario para darnos raciones de sentimientos recalentados y enfermos: Resentimientos. La verdad se destruye en el sistema de la ESO y LOGSE y los fines de semana se riegan de alcohol y drogas para consolidar unas generaciones de la nada. No nos sorprendamos demasiado del futuro y sigamos rezando desde la independencia para intentar seguir creando.